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Um episódio inusitado marcou nesta quinta-feira (2) a reunião do parlamento português, que debatia o estado da Nação. Durante o debate, Manuel Pinho, ministro da economia, dirigiu um insulto gestual à bancada do Partido Comunista Português. O incidente levou Augusto Santos Silva, ministro dos Assuntos Parlamentares, a pedir desculpas ao PCP. Não bastou. Pinho, envergonhado, pediu demissão.
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O momento que definiu o destino do agora ex-ministro surgiu no meio da intervenção de Francisco Louçã, quando o dirigente do Bloco de Esquerda falava sobre a situação dos trabalhadores das minas de Aljustrel.
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Enquanto Louçã intervinha, o líder da bancada parlamentar do PCP, Bernardino Soares, dirigiu-se ao ministro da Economia, dizendo que Manuel Pinho fora a Aljustrel para ''passar um cheque'' a uma equipe de futebol.
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Transtornado, Pinho ergueu, então, as mãos à cabeça para simular dois chifres, que apontou a Bernardino Soares.
Soares, considerou que o incidente que levou à demissão de Pinho, demonstra o ''desnorteamento do governo''.
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''Este ministro sai perante um episódio lamentável, mas traduzindo um desnorteamento que é generalizado ao governo e que bem releva da forma como a população está a ver esta política e rejeita esta orientação do governo'', afirmou o líder da bancada comunista, momentos depois de o primeiro-ministro ter anunciado aos jornalistas a saída do ministro Manuel Pinho.
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O gesto do ex-ministro acabou por marcar o resto do debate e motivar uma vaga de condenações ao governo de José Sócrates.
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O Partido Ecologista ''Os Verdes'', parceiro dos comunistas na CDU, condenou a ação de Pinho, e a deputada Heloísa Apolónia disse também esperar que o apontar de responsabilidades ao conjunto das políticas do governo de José Sócrates não ficasse ''minado'' pelo gesto.
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À saída do debate, o primeiro-ministro anunciaria a demissão do ministro da Economia e a entrega da pasta a Teixeira dos Santos.
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El ministro de Economía de Portugal dimite tras llamar cornudo a un diputado
La caída de Manuel Pinho se produce a poco más de dos meses de las elecciones y debilita aún más el Gobierno socialista
.FRANCESC RELEA - Lisboa - 02/07/2009
La fragilidad política del primer ministro portugués, José Sócrates, ha aumentado con un escándalo mayúsculo en el Parlamento, que provocó la dimisión del ministro de Economía, Manuel Pinho. Pésima señal en la recta final de la Legislatura, a poco más de dos meses de las elecciones. La Asamblea de la República, en sesión plenaria, realizaba el último debate parlamentario antes de vacaciones sobre el Estado de la Nación, en el que la oposición en bloque, derecha e izquierda, condenó la política del Gobierno socialista.
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El diputado Bernardino Soares, portavoz del grupo parlamentario comunista, estaba en el uso de la palabra, cuando desde su escaño en el banco del Gobierno, el ministro Pinho gesticuló ostensiblemente colocando los dedos índice en la cabeza, para llamar cornudo al diputado del PCP. El debate era sobre la difícil situación que atraviesan las minas de zinc de Aljustrel, en la región de Alentejo.
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Soares dijo que el ministro había visitado aquella localidad para entregar cheques. Como respuesta, el ministro hizo el gesto que provocó una sonora protesta en la Cámara, sobretodo en los escaños comunistas y del Bloco de Esquerda, profundamente ofendidos. La cascada de protestas desde todas las filas políticas parecía interminable.
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Las disculpas no tardaron en llegar, primero del ministro de Asuntos Parlamentarios, Augusto Santos Silva, que reconoció el "exceso" de Manuel Pinho, y después en boca del jefe de Gobierno, José Sócrates. El ministro en cuestión admitió su error y abandonó la sala. Ante los periodistas dijo que fue "un gesto desesperado". El PCP y el Bloco de Esquerda exigieron la dimisión. El resto de grupos parlamentarios reclamaron disculpas de parte del afectado y del primer ministro.
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En un gesto inédito, José Sócrates, condenó el comportamiento de su ministro, que calificó de "inaceptable", y pidió públicamente disculpas en nombre del Gobierno a la Asamblea de la República. "Sé que el señor ministro ya ha dicho estar arrepentido, pero nada justifica aquel acto". Poco después, el primer ministro aceptó la dimisión de Pinho, cuyo puesto será ocupado por el actual titular de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos.
in El Pais
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